Se ubica en el centro de la hoya de Málaga, entre los Montes, el río Guadalhorce y la franja costera que lleva a la Axarquía. Su privilegiada situación geográfica ha atraído desde siempre navegantes, comerciantes, pobladores .. que han ido dejando su impronta en esta ciudad ahora cosmopolita, comercial, abierta y hospitalaria. Pasear por Málaga le ofrecerá la oportunidad de conocer su milenaria historia, acunada entre el mar y los montes.
El centro de la ciudad es una combinación de su antiguo trazado, de herencia islámica, cuya impronta aún conservan algunas vías como calle Granada, con las reformas urbanísticas del siglo XIX. La calle Larios constituye el eje principal del centro histórico. Son muchos los lugares de interés: por oriente la bda. del Palo, con sus casas típicas de pescadores, sus calitas, desemboca en el Paseo Marítimo con sus playas. Hacia el centro, el Parque, la Catedral, el Castillo de Gibralfaro, la Alcazaba, y el Teatro Romano. Más arriba, la Plaza de la Merced, en una de cuyas casas nació el genial Picasso. Todo ello salpicado de numerosas iglesias y edificios civiles de interés. Dominando todo este conjunto los Montes de Málaga, Parque Natural de gran belleza.
Además le ofrecerá otras muchas ofertas turísticas: museos, parques, jardín botánco, teatros, toros, campos de golf, deportes acuáticos... El turismo se erige como el principal motor de la economía malagueña. El alma de la ciudad se manifiesta singularmente en sus fiestas. Un paseo por sus calles nos evoca su espectacular Semana Santa y su grandiosa Feria en la que podrá degustar su "pescaíto frito", el rey de la gastronomía malagueña. No podrá pasear por Málaga sin probar sus genuinos boquerones vitorianos.
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